El Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz) publicó un informe que recopila el saldo de la violencia en Colombia contra los defensores de derechos humanos y excombatientes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia – Ejército del Pueblo (FARC-EP) desde que se firmaron los acuerdos de paz, en 2016.
Titulado «Posacuerdo Traumático» el documento señala que 1.090 líderes sociales fueron asesinados en los últimos 4 años. El año más mortal fue el del ascenso a la presidencia de Iván Duque, en 2018, con 298 víctimas, mientras que en 2020 el saldo de muertos ha sido de 291 personas. «El 63% de los homicidios se han perpetrado en el gobierno del presidente Duque», dice una nota de WRadio que reseña al informe.
El sitio web añade que «los 1.090 asesinatos se perpetraron en 288 municipios de la geografía nacional. El departamento del Cauca es el más afectado con 264 líderes comunales ultimados, seguido por Antioquia en donde 140 defensores han sido asesinados».
Los principales afectados han sido las comunidades indígenas y campesinas. Del total de homicidios en cuatro años, 294 líderes sociales eran indígenas y 203 eran campesinos.
Por otro lado, la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, condenó el incremento de la violencia en Colombia, en especial durante el año en curso.
«La Oficina de la ONU para los Derechos Humanos en Colombia ha documentado 66 masacres, en las que 255 personas fueron asesinadas, en 18 departamentos del país. Además, la Oficina ha recibido información sobre el asesinato de 120 defensores de derechos humanos en lo que va de año», dice una publicación en el sitio web del organismo.
El equipo de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos señaló que las cifras reflejan los casos reportados, sin embargo, temen que este pueda ser mayor, pues las restrincciones por la pandemia de covid-19 ha dificultado los trabajos para registrar la violencia en el territorio colombiano.
T/Agencias
