El presidente de Estados Unidos (EEUU), Donald Trump, deberá ser investigado y si se justifica, deberá ser procesado por posibles delitos federales, consideró Andrew Weissmann, un fiscal e investigador estadounidense, reseña Prensa Latina.
El diario The New York Times publicó el señalamiento de Weissmann, fiscal superior en la investigación del abogado especial Robert Mueller e investigador de la Facultad de Derecho de la Universidad de Nueva York.
En su artículo de opinión titulado ¿Debería Trump ser procesado?, Weissmann manifestó que cuando la administración Biden asuma en 2021 enfrentará una decisión «única y difícil», pero por muy doloroso y duro que sea para el país, «creo que el próximo fiscal general debería investigar a Trump y, si se justifica, procesarlo por posibles delitos federales», sostuvo el fiscal.
Como miembro del equipo del fiscal especial Mueller, el magistrado estimó que la exposición criminal de Trump es clara.
«Hemos acumulado una amplia evidencia para apoyar la acusación de que el Presidente obstruyó la justicia. Esa opinión es ampliamente compartida. Poco después de que se publicara nuestro informe, cientos de ex fiscales llegaron a la conclusión de que las pruebas apoyaban esa acusación», aseveró.
Explicó que Trump no puede señalar lo que la investigación del abogado especial no encontró (por ejemplo, «colusión») cuando obstruyó esa misma investigación.
Las pruebas en su contra incluyen el testimonio de Don McGahn, antiguo asesor en la Casa Blanca, que detalló cómo el Presidente ordenó el despido del asesor especial y cómo, cuando ese esfuerzo se divulgó en la prensa, el mandatario suplicó a McGahn que negara públicamente la verdad, refirió Weissmann.
Indicó que la responsabilidad criminal del gobernante va más allá a las acciones antes de asumir el cargo. El fiscal de distrito de Manhattan, Cyrus Vance, lo investiga sobre fraude fiscal y bancario y el fiscal general de Nueva York lleva a cabo una investigación civil sobre alegaciones similares, algo, enfatizó, que podría convertirse rápidamente en una investigación criminal.
Dado que algunas de las actividades en cuestión son anteriores a su presidencia, Weissmann consideró que sería insostenible permitir que Trump gane una elección federal para inmunizarlo de las consecuencias de delitos anteriores.
«No aceptaríamos ese resultado si se encontrara que un ex Presidente cometió un grave delito violento», subrayó.
«El mandatario puede muy bien elegir perdonar no sólo a su familia y amigos antes de dejar el cargo, sino también a sí mismo para evitar la responsabilidad penal federal, pero eso no tendría ningún efecto en su potencial exposición criminal a nivel estatal», añadió el magistrado.
T/Prensa Latina
