El líder indígena de Bolivia Evo Morales, quien renunció el pasado domingo a su cargo como jefe de Estado tras el golpe de Estado en su contra; denunció este viernes ante la comunidad internacional la represión con armas de fuego en la nación suramericana por parte de la Fuerzas Armadas y la Policía Nacional.
“Condeno y denuncio ante el mundo que el régimen golpista que tomó el poder por asalto en mi querida Bolivia reprime con balas de las FFAA (Fuerzas Armadas) y la Policía al pueblo que reclama pacificación y reposición del Estado de Derecho. Ahora asesinan a nuestros hermanos en Sacaba, Cochabamba”, escribió Morales en su cuenta en la red social Twitter.
Más temprano, el secretario de Comunicación del Movimiento Al Socialismo (MAS), Gualberto Ariste, la represión policial registrada este viernes en el departamento boliviano dejó un saldo de cuatro personas asesinadas por armas de fuego.
Desde que se impuso el gobierno de facto, encabezado por la autoproclamada Jeanine Añez, se ha registrado 14 personas asesinadas.
En este sentido, Morales, quien se encuentra asilado en México tras su renuncia, advirtió que los “golpistas se esfuerzan para disimular su racismo con falsos ‘desagravios’ a la Wiphala. El pueblo ya se ha dado cuenta. Al ultrajar el símbolo de la dignidad y unidad con identidad de los pueblos han abierto una herida en el espíritu de hermandad de nuestra querida Bolivia“.
Al respecto, exhortó a las fuerzas de seguridad que responden al gobierno de facto, a cesar la violencia contra el pueblo boliviano.
“Pedimos a las FFAA y a la Policía Boliviana que paren la masacre. El uniforme de las instituciones de la Patria no puede mancharse con la sangre de nuestro pueblo”, instó Morales en la red social.
Desde el inicio de las manifestaciones el pasado 21 de octubre, señala un informe de la Defensoría del Pueblo de Bolivia, se han registrado, además, 542 heridos, muchos de ellos por la Policía Nacional.
T/AVN
