El último informe presentado por la Alta Comisionada de Derechos Humanos de Naciones Unidas, Michelet Bachelet, el pasado 20 de marzo, en el que entre otras cosas habló sobre la “criminalización de las protestas y la disidencia pacífica” en el país, despertó una ola de críticas por parte de organizaciones de víctimas y familiares de venezolanos fallecidos durante las guarimbas de 2015, 2016, 2017 y 2018.
La Fundación Latinoamericana por los Derechos Humanos y el Desarrollo Social (Fundalatin) fue la primera en rechazar el informe ante el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, por considerar que no refleja la verdad de Venezuela.
La periodista Isbemar Jiménez, presidenta del sistema Radio Nacional de Venezuela, durante el programa Vía Alterna de RNV, se refirió a la participación de María Eugenia Russian, presidenta de Fundalatin, quien aseguró, durante la actualización oral de la situación de Derechos Humanos en Venezuela, que el documento invisibiliza las víctimas de los actos de violencia promovidos por sectores de la oposición.
“¿Qué se puede esperar?” de este informe que desconoce a las víctimas de las guarimbas, se preguntó Jiménez, al evocar el caso de Orlando Figuera, el joven de 22 años que fue apuñalado y prendido en fuego por un grupo de opositores que lo identificaron como partidario del gobierno de Nicolás Maduro, mientras éste transitaba por los alrededores de la Plaza Altamira, donde tenía lugar una protesta de la oposición.
“Los casos como el de Orlando Figuera no existen para la señora Bachelet, como no existen para este sistema que busca criminalizar la Revolución Bolivariana, sin realmente profundizar sobre la situación de Venezuela”, dijo la periodista, quien se mostró poco esperanzada sobre un cambio de visión en el análisis hecho por la Alta Comisionada de Naciones Unidas.
Escuche a la periodista Isbemar Jiménez
T/RNV WEB
