El Gobierno de Venezuela, a través de comunicado emitido por la Cancillería, lamentó el asesinato de la activista de los derechos humanos y concejala del Partido Socialismo y Libertad (PSOL) de Brasil, Marielle Franco.
En ese sentido, envió un mensaje de solidaridad al pueblo brasileño, a los integrantes de esa organización y a los familiares de Franco, quien fue tiroteada mientras transitaba en su vehículo por una calle del centro de la ciudad de Río de Janeiro, luego del acto político Jóvenes negras: moviendo las estructuras, centrado en la lucha afrofeminista.
Asimismo, el Gobierno venezolano manifestó en la misiva su «repudio absoluto a toda forma de violencia política que atente contra el Estado de Derecho».
En el auto junto a Franco, se encontraba el conductor del vehículo, quien falleció, y su asesora Fernanda Chaves, quien sobrevivió.
A continuación comunicado íntegro:
El Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela expresa públicamente, en este momento de pena, su más profundo sentimiento de solidaridad con el Pueblo de Brasil por el repudiable asesinato de la concejala del partido Socialismo y Libertad (PSOL) de la Cámara Municipal de la ciudad de Rio de Janeiro, Marielle Franco.
Mujer luchadora por los derechos humanos, la igualdad social, por la visibilidad de las mujeres afrodescendientes, de las comunidades pobres y periféricas, cuya última acción heroica fue denunciar los riesgos de la militarización de las comunidades populares de Río, Marielle es y continuará siendo, una voz militante por los derechos de los excluidos y contra la represión y la violencia de la que está siendo víctima el Pueblo brasileiro.
Venezuela presenta sus más sentidas condolencias a los compañeros y compañeras del partido Socialismo y Libertad (PSOL) a los familiares de la víctima, al Pueblo brasileño; y expresa su repudio absoluto a toda forma de violencia política que atente contra el Estado de Derecho.
En palabras de nuestro cantor Alí Primera, decimos: Los que mueren por la vida no pueden llamarse muertos” ¡Marielle Franco, presente!
