En Venezuela, los ciudadanos han acudido a diversas técnicas comerciales para hacerle frente a la guerra económica. Una de ellas ha sido la plataforma mercantil Trueque 2.0.
Se trata de una de las transacciones comerciales más antiguas de la humanidad que recobra fuerza en Venezuela. Unos lo practican por simple necesidad debido a la escasez de productos básicos, y otros porque han encontrado en la difícil situación económica que atraviesa el país una oportunidad para promover nuevas formas de vivir y relacionarse.
Así, Isabel, madre joven de 28 años y usuaria de la plataforma, explica que encontró en las redes sociales una alternativa: «Es terrible hacer pasar a una madre con sus hijos a buscar supermercado por supermercado, farmacia lo que te hace falta, porque ya no es solo la comida o los pañales, sino también la medicina».
El 2015 fue un año particularmente difícil en términos económicos para los venezolanos. Según cifras del Banco Central Venezuela, se registró una inflación del 141%, 87% de acaparamiento y un PIB que disminuyó el 7,1%. A esta fotografía se suma la caída abrupta de los precios del petróleo y el masivo contrabando de alimentos y productos de primera necesidad por parte de los conocidos como ‘bachaqueros’: ciudadanos que dedican sus días a hacer interminables colas frente a los supermercados para comprar los productos que subsidia el Estado y luego revenderlos hasta diez veces más caro.
Todos ellos forman parte de diversas organizaciones de base que llevan décadas luchando por una sociedad menos injusta. Consideran que el país vive una guerra económica cuyo objetivo final es derrocar a la Revolución Bolivariana; y por esa razón, decidieron que era el momento de actuar. En Venezuela unas 200 familias se han organizado en la Red Alpargata Solidaria, un proyecto de intercambio colectivo que desde el poder popular propone soluciones concretas ante la difícil situación económica que vive el país.
T/ RT
