En tiempo de guerra económica, el ingenio es la clave de todos los males. En esta oportunidad te traemos la receta de harina de maíz pilado, como la hacían nuestras abuelas, pero no con esa mezcla molida de Los Mendoza. En tus manos está la solución para preparar unas ricas arepas, ¿te animas?
Arepa de maíz pelado
2 kg. de maíz pilado, seco y previamente seleccionado.
10 tazas de agua.
2 1/2 ctda. de sal.
1 1/3 tazas de agua para amasar.
1 cda. de aceite para engrasar el budare.
Preparación para 12 arepas:
Cocinas previamente el maíz para que esté frío a la hora de molerlo y preparar la masa. Para cocinarlo se extiende y limpia con cuidado, quitándole los sucios y pedacitos de cáscara. Luego se coloca en un recipiente y se lava con abundante agua, moviéndolo con las manos hasta que el agua salga clara. En una olla sin tapa se ponen a hervir las 10 tazas de agua con el maíz, durante 20 o 25 minutos, dependiendo del tamaño del grano o de su entereza. Se revuelve esporádicamente para que los granos no se peguen del fondo.
Luego lo retiras del fuego y se escurre el agua, agregándole agua fresca hasta alcanzar el volumen original. La consistencia adecuada del maíz, después de cocido, es blando por fuera y duro en el centro. Para molerlo se lava nuevamente, escurriendo y despojándolo de las partes oscuras y los restos de cáscara, y se introduce en un molino manual o eléctrico. Una vez lista la masa se le agrega la 1 1/3 taza de agua y las 2 1/2 cucharadas de sal, disueltas en esta. Se procede a amasar hasta lograr un consistencia suave y compacta.
Este proceso puede durar entre 5 y 10 minutos. Cuando esté listo el amasado, al budare, ¡arme sus arepas y listo!
T/Web RNV