El presidente de la República, Nicolás Maduro, calificó como una burda y grosera política intervencionista las operaciones encubiertas de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) contra Venezuela. Desde el Congreso Nacional de Cocineras y Cocineros de la Patria, el jefe de Estado alertó sobre esta amenaza a la paz nacional.
«Autorizaron que la CIA haga operaciones contra Venezuela, contra la paz de Venezuela; según ellos, nunca se había visto, pero siempre lo han hecho», denunció el mandatario. Señaló que la propia CIA ha desclasificado documentos que comprueban su participación histórica en golpes de Estado en diversos países.
El presidente recordó casos emblemáticos de intervención de la CIA en América Latina y otras regiones, mencionando los golpes contra Jacobo Árbenz en Guatemala (1954), Juan Bosch en República Dominicana (1965), João Goulart en Brasil (1964) y Salvador Allende en Chile (1973). Calificó de inmoral que pidan perdón por estas acciones manteniendo su política intervencionista.
Vinculó estas operaciones con una estrategia de guerra psicológica contra Venezuela y reveló un significativo antecedente: el intercambio humanitario de julio pasado donde se rescataron 252 venezolanos secuestrados en El Salvador y se entregaron 10 terroristas vinculados a la CIA. «¿Alguien se puede creer que la CIA no está operando en Venezuela desde hace 60 años?», cuestionó.
Frente a las narrativas injerencistas, el presidente Maduro fue contundente: «Le decimos que el pueblo de Venezuela no quiere ser esclavo ni colonia más nunca, jamás. Este pueblo ha decidido ser libre, independiente y soberano». Rechazó enfáticamente cualquier pretensión colonial sobre el país.
Finalmente, aseguró que el pueblo venezolano está alerta ante estos ataques que responden a intereses sobre los recursos naturales. «Vamos a ganar la paz que merece el pueblo venezolano», concluyó el dignatario, expresando confianza en la capacidad de resistencia nacional frente a la conspiración internacional.
T/RNV