El presidente Nicolás Maduro, instó a cesar las afirmaciones discriminatorias y xenofóbicas contra la identidad venezolana. A través de su canal de Telegram, defendió el carácter del pueblo, describiéndolo como «decente, honesto, trabajador, solidario y humano».
El jefe de Estado rechazó específicamente las comparaciones entre la identidad venezolana y grupos criminales que, aseguró, «ya están acabados en nuestro país». Frente a esta situación, propuso una solución concreta: «la gran vacuna contra esta situación es la unión de los venezolanos».
Como parte de esta estrategia, destacó el papel fundamental del Consejo Nacional por la Soberanía y la Paz. Durante un balance de la instalación de este organismo, afirmó que «apenas a un mes de constituido, se ha hecho un gran trabajo».
El primer mandatario señaló que actualmente Venezuela goza de «un consenso ampliamente mayoritario de venezolanos y venezolanas que queremos armonía, diálogo, paz, entendimiento».
Calificó como «una cobardía» los llamados a la intervención militar o al bombardeo de Venezuela desde el exterior. Enfatizó la necesidad de contrarrestar estas posiciones con un movimiento organizado.
Finalmente, recalcó la urgencia de construir «un gran movimiento nacional e internacional, sectorizado para fortalecer el consenso contra la guerra y en favor de la paz en el Caribe». Esta iniciativa busca consolidar posiciones de diálogo y rechazo a la violencia.
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