Queremos decirle al mundo que Venezuela no está sola

La Francia Insumisa es en este momento el mayor frente político de izquierda de la República Francesa. En las elecciones pasadas, en la primera vuelta, su líder principal y candidato presidencial Jean-Luc Melenchon, obtuvo el cuarto lugar con el 19,5% de los votos. Hoy se encuentra en campaña para lo que han denominado “la tercera vuelta”, que son las elecciones legislativas que se realizarán entre el 11 y el 18 de junio donde el movimiento espera convertirse en una fuerza importante para combatir el programa neoliberal de Emmanuel Macron y la ultaderecha que encarna el Frente Nacional (FN) de Marine Le Pen.

El responsable para América Latina y el Caribe del movimiento “Francia Insumisa” Christian Rodríguez, visitó Caracas para, en nombre de su organización, expresar su solidaridad con el pueblo venezolano que hoy se encuentra en la mira de una agresión imperial que busca apoderarse del petróleo y destruir al país. El Correo del Orinoco conversó en exclusiva con él.

Sobre Francia Insumisa, Rodríguez deja en claro que no tiene “nada que ver con el viejo esquema de hacer política. En estos últimos años tenemos más de 550 mil adherentes. Es un frente de izquierda donde participan movimientos sociales, personalidades. Consideramos que el modelo tradicional de hacer política está obsoleto, y eso se confirma cuando los partidos clásicos en Francia, el Partido Socialista y el Republicano ya no tienen ninguna influencia”.

Para Rodríguez, si en los comicios legislativos Francia Insumisa logra una importante participación tendrá la oportunidad de cambiar la historia y el rumbo neoliberal en las políticas económicas de ese país.

Otra guerra por petróleo

Con respecto a cómo observa la situación en Venezuela, toda vez que pudo observar in situs la realidad, indicó que se trata de otra agresión imperialista por petróleo.

“La disputa fundamental, lo que aquí sucede, tiene que ver con la distribución de la riqueza. Venezuela es un país clave con el tema del petróleo y para el imperialismo no puede existir así como está, es decir, en este esquema de distribución de los recursos en programas sociales para los sectores populares”, señaló.

“El estado de ataques, de movilización mediática es brutal. Quieren hacer ver que aquí ya hay una guerra civil y no se puede venir. Ahora mismo soy considerado un héroe por mucha gente (risas) por haber venido hasta acá. Y he pasado aquí unos días muy agradables, recorriendo las calles, hablando con la gente. Hasta fui a la playa”, relató.

En ese sentido, recalcó la existencia de una campaña de contrapropaganda que atenta contra la imagen de Venezuela en el extranjero para crear la matriz de la inexistencia de un sistema democrático. Al respecto recalcó sobre la coyuntura de la convocatoria a la Asamblea Nacional Constituyente por parte del presidente Nicolás Maduro que “todo lo que sea para profundizar la democracia y la participación popular es necesario apoyarlo”.

Con la ultraderecha no hay diálogo

“Lo que hemos visto de la oposición es que con esos sectores violentos no hay posibilidad de diálogo. Y es que no puede haber diálogo con una corriente que mata, que quema, que destruye, que atenta en contra de la ciudadanía. Allí no hay diálogo, hay una tentativa de destrucción de unos con otros”, destacó.

Sobre es tema alertó que la extrema derecha en Venezuela “viene con un odio de clases. La propuesta que tiene desde hace casi 20 años es derrocar a Chávez, antes, y hoy derrocar a Maduro. No le conocemos a estos sectores otro proyecto, solo el odio que ahora tiene una extraña expresión pública con gente que se desnuda, con el uso de excremento. Nos preguntamos ¿Qué manera de hacer política es esa?”.

Hay que combatir el fascismo

En Francia se corre peligro de un resurgimiento de este movimiento nazi-fascista que ha proliferado en Europa. Sobre ese asunto, Rodríguez expresó: “El fascismo nace allí done el Estado ha abandonado a la ciudadana. La extrema derecha crece donde hay abandono, injusticia, desigualdad, desplazados. Tenemos cientos de refugiados, excluidos, creados por las guerras en las que participan las propias potencias europeas”.

“El fascismo hay que combatirlo tanto en sus causas, la pobreza, la desigualdad, como en su ideología que es la exclusión, la ignorancia, el miedo al otro”, aseveró. “Ese es el fascismo que representa en Francia el partido de Marine Le Pen”, prosiguió.

En Venezuela también hay un resurgimiento de fascismo pero por otras razones. La violencia es inducida como parte de una estrategia desestabilizadora.

“Es muy parecido a lo que sucede hoy en Venezuela a lo que vivió Chile con el golpe en 1973”, indicó el político de origen chileno-francés.

“Yo era un niño cuando el golpe fascista de Augusto Pinochet, solo recuerdo que no había clases. También evoco una escena en que vi lo que parecían sacos de harina cayendo en hileras y después supe que se trataba de personas en un fusilamiento masivo. Entré a la lucha política por el activismo con el movimiento por los desaparecidos y detenidos de la dictadura. Fui apresado a los 16 años y a los 17 condenado al exilio”, contó Rodríguez.

Para Rodríguez, la estrategia del imperialismo norteamericano usada contra el gobierno de Salvador Allende hace cuatro décadas, es la misma ahora contra Venezuela.

“Querían destruir en Chile la posibilidad de una vía pacífica para construir el socialismo. Allá usaron gente pagada. Contrataron jóvenes. A los camioneros que transportaban los alimentos les daban una cuota diaria en dólares para que mantuvieran el supuesto “paro general”. Buscaban dejar a las ciudades sin comida para provocar la ira, cólera de la población hacia el Gobierno. Es la política del hambre”, recalcó.

“Es muy peligrosa esa política del hambre porque genera mucho descontento. Y si el pueblo ve que hay gente que sí tiene y no le falta nada, esto se convierte en un polvorín. Es la misma estrategia de hace 40 años pero han perfeccionado las técnicas sin duda. Aquí recibí la información de los “kits” que le dan a los jóvenes para “protestar”, que contienen las máscaras, los cascos, las armas y la droga. Muy peligroso esto último. Buscan alienar a esos muchachos. Convertirlos en adictos usando drogas duras. Eso prueba el tipo de humanidad que pretenden, quieren una sociedad alienada”, explicó.

“Hoy estamos aquí porque la solidaridad es la ternura de los pueblos y queremos expresar nuestra solidaridad con Venezuela. Queremos decirle al mundo que Venezuela no está sola”, enfatizó.

Finalmente, Rodríguez indico que desde Europa y para su movimiento Francia Insumisa, se percibe a América Latina como un territorio de esperanza. Vemos las transformacionales en Bolivia, en Ecuador, en Venezuela y confiamos en que es posible construir una alternativa al neoliberalismo”.

T/ Modaira Rubio
F/ María Isabel Batista